Socarrás.

Nos encontramos una vez más en la ciudad de la eterna primavera. Nos recibe una cortina de agua –que al principio pareciera incómoda– pero que luego aporta un elemento esencial para la pasarela inaugural de Colombiamoda 2022: “A- mar” a cargo de Juan Pablo Socarrás. 

2022: el país se mueve con algo de incertidumbre y sin embargo el sector moda regresa con más fuerza nunca. Con casi un incremento del 8% en todo el sector y con el potencial suficiente para transformarnos en la potencia del textil sostenible del futuro, Colombiatex y Colombiamoda abren sus puertas una vez más para alimentarnos del sistema moda por una semana.


Consecuente con su estrategia de hace un año, Juan Pablo Socarrás en alianza con Coca-Cola nos trae “A-mar” un segmento que continua el tejido de sus “Historias hechas a mano” que en esta ocasión fusiona trabajo artesanal de la región latina respectivamente de Colombia, Guatemala y México. Una iglesia con carácter ancestral fue la locación seleccionada por el diseñador para dar apertura a la semana de la Moda de Colombia. 

 

Vestidos fluidos que simbolizan la conexión de Socarrás con el agua, un hilo fluvial que al igual que la artesanía une su narrativa a lo largo de sus colecciones y que encuentra en su desembocadura un guiño a la vida sartorial de Socarrás y su obsesión por el traje.

Las historias llevadas por medio de la música que trasciende de puerto en puerto, (se escucha un canto “que se lo lleve el río” de fondo) la armadura local, hecha a mano por mujeres cuyas historias viajan por generaciones y elaborada a partir de materiales sostenibles como las tapas de las latas y pet reciclado. Bendiciones femeninas que se ven representadas en urdimbre y trama crean tejidos únicos; pues en el tejido dejamos lo que llevamos dentro. Tejidos que al igual que el río, llevan patria, mujer y oficio.

A través de los vitrales también se cuenta una historia de evolución de color: los tonos, como vistos entre el agua de una colección –que como todo lo que le gusta a Juan–fluye con generosidad. Ponchos y elementos con flecos que nos llevan a ese constante andar del río y el cierre, una “Ruana” / “Poncho” maravilloso que se arrastra con delicadeza y asemeja una capa real que en traducción local lee “historias hechas a mano”.

 

Que se lo lleve el río –canta el fondo,

 

Que se lo lleve el tejido –me dice mi corazón. 

Previous
Previous

Raíz.

Next
Next

Cmoda: Juan P. Socarrás